Sinopsis: La novela comienza con una escena familiar en la que Brunetti, Paola y sus dos hijos llevan a cabo uno de esos peculiares rituales familiares “que desconciertan a los que no pertenecen a ellas, igual que otorgan gran valor a cosas que los miembros de otros grupos no tienen en tan gran estima”.
La vida cotidiana de los Brunetti, con las típicas preocupaciones por el futuro de los hijos, se verá sacudida por la muerte por sobresodis de pastillas de un hombre sordo y deficiente que trabaja en una tintorería de su vecindario.
El suceso conmociona especialmente a Paola, quien sentirá remordimientos por no haber reparado nunca en un hombre que por su condición siempre había pasado desapercibido a los clientes de la tienda.
La inquietud de su mujer y una serie de detalles que no terminan de encajar, provocarán que Brunetti inicie una investigación que se irá complicando cada vez más, y terminará por involucrar al equipo de la comisaría en un caso en el que todos los implicados ocultan secretos y a Brunetti le resultará difícil averiguar la verdad sobre la misteriosa y triste vida del fallecido.
La investigación se alternará con un curioso encargo del jefe de Brunetti que le pedirá que intervenga en un caso relacionado con el socio de la futura nuera del alcalde que podría hacer peligrar su reelección.
Harto de los políticos, aceptará a regañadientes comenzar las pesquisas de un caso de corrupción que refleja la realidad de un país “en el que nadie estaba libre de pecado, todo el mundo tenía miedo de que alguien alargara la mano para agarrar una piedra, sobre todo si la mano tenía alrededor el puño de un uniforme”.
La novela consigue mantener el equilibro entre una trama dura, que saca a relucir lo peor del ser humano, y los problemas cotidianos en los que se desenvuelve el genial protagonista.
Y, como telón de fondo, asistimos al crudo retrato de la sociedad italiana, con los problemas de la crisis, la corrupción y la inmigración, además de sufrir “la creciente simbiosis entre la Mafia y la clase política”.
Protagonizadas por el comisario Brunetti, ha publicado, siempre en Seix Barral, las novelas Muerte en La Fenice (1992), que obtuvo el prestigioso Premio Suntory a la mejor novela de intriga, Muerte en un país extraño (1993), Vestido para la muerte (1994), Muerte y juicio (1995), Acqua alta (1996), Mientras dormían (1997), Nobleza obliga (1998), El peor remedio (1999), Amigos en las altas esferas (2000) Premio CWA Macallan Silver Dagger, Un mar de problemas (2001), Malas artes (2002), Justicia uniforme (2003), Pruebas falsas (2004), Piedras ensangrentadas (2005), Veneno de cristal (2006), Líbranos del bien (2007), La chica de sus sueños (2008), La otra cara de la verdad (2009), Cuestión de fe (2010), Testamento mortal (2011) y La palabra se hizo carne (2012).
Es también autora del libro de ensayos Sin Brunetti (Seix Barral, 2006) y prologuista de la atípica guía Paseos por Venecia (Seix Barral, 2008).
Sus libros, traducidos a veintiséis idiomas, incluido el chino, son un fenómeno de crítica y ventas en toda Europa y Estados Unidos. Desde 1981 reside en Venecia.
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