1. Calienta muy bien. A veces este paso nos lo saltamos, pero no calentar bien puede suponer que al cabo de 10-15 minutos no aguantemos el ritmo de running. Nuestro cuerpo necesita adaptarse al esfuerzo de correr y, por lo tanto, hay que calentarlo muy bien. Para ello os recomiendo trotar un poquito, mover los brazos y las piernas, y realizar estiramientos activos, que en un vídeo ya os explicaré cómo realizarlos. Tenemos que dedicar unos 10 minutos a calentar.
3. Lleva un buen calzado. Llevar un calzado poco adecuado hace que, frecuentemente, sufras lesiones o pequeños daños. Hay que llevar un calzado adecuado a tu tipo de pie, al tipo de entrenamiento o a la superficie por la que vas a correr (carretera o montaña).
4. No te desmotives. Aunque lleves ya un tiempo corriendo o haciendo deporte, no lo dejes. La clave de todo está en la constancia, y en saber llevar un estilo de vida que incluya el deporte siempre, y no solo si quieres perder peso. La constancia y el esfuerzo harán que veas resultados a largo plazo. ¿Lo mejor? Que los resultados a largo plazo son los que harán que te mantengas en un mejor nivel físico por más tiempo, y que te sea más difícil coger peso.
5. Usa ropa adecuada. Es importante usar ropa adecuada, porque pasar demasiado frío o demasiado calor puede afectar a tu rendimiento. Para verano, usa pantalones cortos o piratas que se amolden a tu cuerpo, una camiseta de tirantes o manga corta y, si hace mucho sol, una gorra para protegerte la cabeza y evitar coger dolor. Para invierno, unas mallas largas, una térmica de manga larga para protegerte del frío, un forro polar y, si lloviera, un chubasquero para protegerte del viento y la lluvia.
¿Qué os han parecido estos consejos?
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