Un problema gordo: se ha quedado tirado en Marte. Sí, en Marte. Y ahora qué. Como un nuevo ejemplo de cine que llega más tarde que la vida recibimos “Marte (The Martian)”, que se estrena justo cuando los científicos terráqueos están celebrando el descubrimiento de agua en el planeta rojo; y es que la película, ambientada dentro de unas décadas, tiene como protagonista a un botánico que también anda a la caza del líquido elemento.
Temporalidades aparte, se trata de un estupendo ejercicio de evasión galáctica ajeno a disquisiciones metafísicas y enfrentamientos del hombre contra sí mismo al más alto nivel anímico, espiritual y emocional. Notable mainstream palomitero.
Aventura galáctica que sorprende por un tono abiertamente dinámico y divertido, ajeno a mayores disquisiciones metafísicas que confronten al hombre contra sí mismo en un entorno desolado y devastador. Un notable ejercicio mainstream.
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