Quiérete tal como eres.
Acepta que estás vivo, con tu historia y tus circunstancias, y observarte con ternura, como mirarías a un niño pequeño, con sus aciertos y desaciertos.
Cuando te equivoques, vuelve a intentarlo, no lo tomes como algo personal. No te identifiques con lo que haces. eso no es lo que eres.
No te hagas exclavo de la aprobación ajena, cada cual tiene derecho a tener sus propios gustos y simpatías.
Disfruta del proceso más que de los resultados.
Los procesos ocupan la mayor parte de tu vida; los resultados son, en muchas ocasiones, meras impresiones.
La vida es como es, aprende a compartir los logros ajenos, practica honestamente la alegría de compartir las victorias o los méritos ajenos, como si fueran propios: se multiplicará tu felicidad.
Lo importante no son los éxitos conseguidos: puedes tener toda una colección de trofeos, que de nada te valdrá si no tienes capacidad para disfrutar de la vida.
Feliz Miércoles
Silvia Pérez Olmos
No hay comentarios:
Publicar un comentario