Mi único límite, el infinito.

Hay veces que dejas todo lo que has vivido por algo que aun ni lo conoces. Son cambios, inesperados. 
Cambios que no sabes si irán a mejor o a peor. 
Tan solo arriesgas, porque sabes que pase lo que pase siempre quedarán ellos. 
Y por muy malo que pueda ser ese cambio, también puede que sea el mejor de tu vida. 
Nuevas experiencias, nueva gente, nuevos pensamientos, nuevos cambios. 
La clave es no perder la esperanza, tener fe. 
Pero no hay dos momentos iguales, ni dos besos parecidos, ni dos miradas que tengan el mínimo parecido. 
Todo es diferente, no hay nada igual; para mi, las cosas solo ocurren una vez. 
Por eso empecemos con un "vivamos la vida al máximo", con ir a un lugar donde la palabra imposible no esté prohibida, con no tener miedo a los finales, con no tener miedo a nada. 
Empecemos con un nuevo comienzo, sin problemas, preocupaciones, sin poder ver nada malo, abriendo los ojos solo a lo bueno, viendo siempre el lado positivo, con saber lo que significa vivir, sin reglas, ni compromisos. 
Con un único límite, el infinito. 
Buen Jueves a tod@s ;)))
Silvia Pérez Olmos