La madrugada del 27 al 28 de septiembre será recordada como la madrugada de la Luna. Durante aquella noche, se producirá un doble fenómeno que no se ha vuelto a producir desde el año 1982. Aunque el nombre del fenómeno Superluna Sangrante no es un nombre aceptado científicamente y no tiene relación con la astronomía si no con la astrología, durante aquella madrugada tendremos este precioso fenómeno. Ahora explicamos por qué…
¿QUÉ SUCEDERÁ?
La Luna tiene una órbita elipse con una baja excentricidad que discurre a una distancia media de 384.402 km de la misma y que se recorre de oeste a este, es decir, en sentido antihorario.
Durante su órbita alrededor de la Tierra (que viaja a una velocidad de 1 km/s), por diferentes factores en ocasiones está más cerca (perigeo) o más lejos (apogeo) de la Tierra.
Durante su punto más cercano, la Luna se ubica a 356.000 km de la Tierra, mientras que en su punto más lejano, la Luna se ubica a 406.000 km de nuestro planeta (realmente sería aproximadamente 1,3 segundos luz).
Cuando la Luna se ubica a menos de un 10% de la máxima aproximación a la Tierra y está coincide que es Luna llena, se produce el fenómeno que se llama <
Este fenómeno no sucede siempre, ya que no siempre coincide el hecho de que la Luna esté en su punto más cercano y con Luna Llena.
Aparte de todo ello, no será el único fenómeno que tendremos en la Luna y de forma simultánea esa misma madrugada…
Mientras nuestro satélite natural estará en el punto más cercano de su órbita a nuestro planeta, La Tierra se interpondrá entre el Sol y la Luna y está pasará por detrás del cono de sombra que es proyectado. De esta manera, la Tierra bloqueará los rayos de Sol que la Luna recibe y se oscurecerá, tapando la luna Llena y haciéndola desaparecer temporalmente.
Pero… ¿por qué la Luna se teñirá de rojo?
Este será uno de los fenómenos más curiosos de ver en un eclipse lunar. El cambio de tonalidad de rojo hará despertar la curiosidad a más de uno.
Como decíamos anteriormente, la Luna pasará por detrás de la sombra que proyecta nuestro planeta y será cuando quede totalmente oscurecida. Sucederá entonces otro suceso, cuando la Luna esté en su punto total del eclipse, esté empezará a cambiar de color de oscuro a rojo.
La atmósfera de la Tierra dispersa la luz del sol. La luz roja puede pasar a través de la atmósfera y no dispersarse mucho, mientras que la luz en el extremo azul del espectro se dispersa más fácilmente. Como durante el eclipse, la Luna no estará siendo iluminada directamente por el Sol ya que la sombra de la Tierra tapará el disco solar, los rayos de luz roja dispersos se proyectarán sobre la superficie lunar.
También puede suceder otra razón/situación para que se observe una luna roja y es si hay algún tipo incendio forestal o una erupción volcánica, estás pueden llenar el aire con partículas diminutas.
La luz rojiza proyectada en la Luna es mucho más débil que la luz del sol blanca que recibe normalmente y que luego refleja de nuevo hacia nosotros. Eso es porque la luz es indirecta y porque las longitudes de onda del color rojo son solo una parte de lo que constituye la luz blanca del Sol.
El eclipse lunar de la madrugada del 27 al 28 de septiembre, se podrá observar en los siguientes horarios:
Inicio del eclipse penumbral: 02.12h (horario peninsular)
Inicio del eclipse parcial: 03.07h (horario peninsular)
Inicio del eclipse umbral: 04.11h (horario peninsular)
Punto total del eclipse: 04.47h (horario peninsular)
Fin eclipse umbral: 05.23h (horario peninsular)
Fin eclipse parcial: 06.27h (horario peninsular)
Fin eclipse penumbral: 07.22h (horario peninsular)
La fase del eclipse penumbral, será cuando la Luna pase por la penumbra de la Tierra, mientras que la fase del eclipse umbral será cuando está pase por dentro de la umbra de la Tierra.
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